sábado, 1 de agosto de 2015

Amarga despedida.


Hoy ha sido mi último partido con la Peña Bolística Renedo J. Vela. Han sido 18 temporadas. Unas mejores y otras peores, pero solo me quedo con lo bueno. Algún título logrado, como la Copa Presidente en Suances en el año 2005 contra Puertas Roper, o las tres Copas Federación Española. Varios sub-campeonatos de liga, en definitiva muy buenos recuerdos. También guardo muy buenos recuerdos de los muchos compañeros que he tenido, algunos mas que compañeros amigos. No voy nombrarlos porque alguno se olvidaría y sería injusto. Es una auténtica pena, pero la peña creo que desaparecerá. La afición la ha dado un poco la espalda y la directiva se ha cansado después de tantos años luchando. Espero equivocarme, aunque no lo creo. Yo me he comprometido con Pontejos, curiosamente la peña de la procedía cuando recalé en Renedo. Una nueva etapa que espero sea tan buena como la que he vivido aquí, aunque por razones de edad seguro que no podrá ser tan larga.
Hoy al empezar el partido no teníamos muchas esperanzas de poder entrar en la copa, pero a medida que iba pasando el partido y nos enteramos que Pontejos ganaba en Cerrazo, creció la esperanza y empeoró el juego. Hemos acabado perdiendo con Peñacastillo después de ir ganando dos a uno, y con el empate habría sido suficiente. Nos hemos quedado tocados, sabiendo además que más que probablemente sería el último partido de esta peña. 
El primer chico desde 16 metros y raya al medio al pulgar lo cerró Peñacastillo, Acabaron en 43 bolos, y lo hubiéramos perdido de no ser por un emboque de Isaac con la última bola. 
En el segundo chico otra vez desde 16 metros y raya alta a la mano sumamos 40 bolos. Nos igualaron cuando tenían el chico casi ganado. En la segunda tirada lo hicimos mejor con 44 bolos, pero perdimos el chico por un bolo.
Otra vez el mismo tiro al pulgar. Esta vez no cerraron y nosotros si lo hicimos con 42 bolos, por lo que nos adelantábamos en el marcador con dos a uno.
En el cuarto fue el mismo guión. El que va por delante (nosotros) no cierra y ellos si lo hicieron.
Con empate a dos llegó la clave del partido. Pusieron 15 metros y con raya al medio al pulgar no cerraron. Lo teníamos todo para empatar el partido y fallamos. Perdimos el chico en dos tiradas, sin ser capaces de hacer 40 primero y 44 después.
El último chico sabía que lo perderíamos. Cambiamos a 18 metros, pero con la moral tan baja que no veía opciones de poder hacer una buena tirada. Acabamos en 33 bolos, y Peñacastillo con un buen birle de 28 bolos terminó por llevarse el partido y todas nuestras esperanzas.
Ha sido una pena, porque creo que hemos jugado un buen año, con juego alegre, siempre con rayas al medio y tiros cómodos cuando nos tocaba poner tiro. Mi sensación es que hemos jugado para tener algún punto más, pero nos han embocado mucho, quizás por jugar desde tiros cortos.
Se cierra una época que nunca olvidaré. Gracias a los que hicieron posible que una gran parte de mi vida se la haya dedicado a esta peña.