Hoy es de los días que llegas a casa con malas sensaciones. Enfadado y con sensación de haber hecho el tonto. Nos juntamos cinco bikers, Pepe, Isaác, y dos más a los que no conocía, Chuchi y Salomón (compañeros de trabajo de Isaác). La idea era ir a Sejos, y es lo que hicimos. Dejamos el coche un poco más arriba de Saja dirección Palombera. Desde un poco más abajo empezamos una subida por una pista, unos 15 km hasta el alto de Ozcaba. No es muy duro, con desniveles bastante moderados, pero si no estás bien se hace largo. Desde Ozcaba por carretera unos dos kilómetros hasta Tajahierro donde por una pista a la derecha se accede a Sejos. Ya desde el principio había nieve, pero se podía ir montado en la bici en casi todos los puntos. Poco a poco cada vez más nieve y menos posibilidades de ir montado. Se iba cerrando todo el paso, y había también niebla. Por conocer el Canal del Diablo que nos habían dicho que era muy bonito, seguimos para delante aunque casi siempre empujando la bici (cosa que no me gusta nada). En este momento Chuchi y Salomón decidieron volver por lo andado, y acertaron. Los tres restantes decidimos continuar pensando que el destino estaba cerca, pero no era así. Se quedó el GPS sin batería y ya no sabíamos por donde estaba el descenso. Después de más de hora y media de estar entre nieve decidimos dar la vuelta y volver por el mismo sitio por el que habíamos llegado hasta allí.
Una vez en la carretera de Palombera iniciamos el descenso. Helados de frío no podíamos casi ni frenar. Nunca hemos tenido tantas ganas de llegar al coche. Al final 44,7 km. en 6 horas y 39 minutos.
De estos días se aprende. Nunca más por donde no conozca y con nieve.
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